viernes, 25 de junio de 2010

Divagaciones sobre el transporte público en vísperas de elecciones.


Hace unos días, antes de terminar la jornada, me percaté de que en el último post de Facebook de mi buen amigo Vicente Menchaca aparecían las palabras "transporte" y "público", igualmente llamó mi atención la palabra "modernizar", vocablos que -en conjunto- regularmente coquetean ante el vistazo de cualquier ciudadano bienintencionado... Finalmente, esto generó, si no un debate, unas cuantas líneas que no fueron más allá de una ligera divagación. Alternando las "voces" (o entradas, oposts, propiamente dicho), no llegamos a nada, o quizá sí: preguntarnos si alguno de los flamentes candidatos a la presidencia municipal de Mexicali tiene en su agenda alguna estrategia de cambio que vaya más allá de lo que Vicente y su servidor pudieron dilucidar y que me permito ilustrar enseguida:



miércoles, 23 de junio de 2010

Alicia en las ciudades, recontextualizada



"Es ist bedauerlich dass all diese schönen alten Häuser abgerissen werden müssen".
"Es una pena que todas estas hermosas casas antiguas tengan que ser demolidas".


"Die leeren Flächen sehen aus wie Gräber. 'Haus Gräber'...".
"Los espacios vacíos parecen tumbas. 'Casas tumba'...".


Texto: Guión del film Alice in den Städten (Wim Wenders, 1974).
Imágenes: Capturas digitales de Alice in den Städten (Wim Wenders, 1974); demolición de un edificio institucional en la ciudad de Mexicali. (Junio, 2010).


lunes, 21 de junio de 2010

¿Resanar o dejar las pausas?


Un vacío ha aparecido en la ciudad. Mexicali, más que ofrecernos ruinas, nos ofrece intersticios. Creo que sería más prudente pensar qué hacer en estas grietas urbanas; absurdo sería erigir nuevas estructuras en donde se antoja mejor ver aparecer silencios, pausas; de lo contrario, sería una suerte de resane, en donde la fisura tendría a reaparecer, al mismo ritmo de las réplicas.

sábado, 19 de junio de 2010

La retórica del mestizaje.

En "La ciudad de las columnas", relato que Alejo Carpentier nos compartió sobre La Habana, llama la atención cómo el polifacético autor se permite narrar sus calles, su arquitectura, sus monumentos y su gente, con un lenguaje rico en metáforas; el texto evidencia el modo en que su vida estuvo marcada por el amalgamiento de culturas, por si misma, la narrativa constata la noción de mestizaje. Inicia observando una crítica hacia la modernidad en las ciudades, reacciona a su vez contra una arquitectura fundamentada ortodoxamente en la razón, ésta no entraría en un cosmos de ensoñación como el de Cuba.

La modernidad entró en la Escuela de Artes Plásticas de Ricardo Porro, modernidad al margen de un espíritu vernáculo más fuerte que cualquier dogmatismo de vanguardia.En la ciudad de las columnas los objetos cotidianos, los entornos de la ciudad y el ornamento se rostrifica, adquiere los diversos rostros de su gente, de sus voces, sus ritmos guajiros, gestos todos que la memoria colectiva habanera conserva atesoradamente. Así, como el son cubano de Omara Portuondo, Ibrahim Ferrer o Compay Segundo, las columnas que coexisten en La Habana "cantan" un eclecticismo, conciliando el vigor de la conquista con el espíritu mulato, cabalgando entre el barroco y lo autóctono.

Recordemos que Latinoamérica es un foco de atención dentro de la modernidad arquitectónica, caracterizándose en el Brasil de Niemeyer, la Venezuela de Villanueva o el México de O’Gorman, por citar algunos casos; pero en Cuba, la situación es divergente ante esta simbiosis que logró construirse en nuestro continente. Sin abundar, o ni siquiera tocar el tema de su entorno político, creo que tal simbiosis que ha logrado Cuba se hace diferente por su naturaleza mestiza, mezcla del África negra, la sangre nativa y la colonizadora. Las columnas son símbolo de ello, diferentes entre sí, sabia heterogeneidad...

Imagen tomada de: http://www.flickr.com/photos/10600831@N02/2194918507/

miércoles, 16 de junio de 2010

Después de la pausa

Aparece de nuevo el ánimo por alimentar este blog. Al cumplirse poco más de tres años de iniciar su estancia en línea, conservo y pongo a su disposición la primera entrada de Arquitecturas al borde...
Ahora con un nuevo formato y reinventando su objetivo: compilar lo que en mi andar -concerniente a la arquitectura y la ciudad- ha quedado exento de algún juicio consensuado.